Usadlo por favor,que no cuesta nada y necesito opiniones. :,(...
Y aquí va el pequeño fragmento:
No sabía que extraño impulso la llevó a presentarse frente a
su puerta. Ni siquiera sabía si debía sentirse eufórica por volver a verla o
aterrada por su reacción, las sensaciones originaban una mezcla explosiva
debido a la adrenalina que corría por sus venas. El corazón le palpitaba tan
fuerte que parecía estallar en el interior del pecho. Marcó su número en el
teléfono y espero tres tonos hasta que su voz se hizo oír:
-¿Sí?
Con la voz algo temblorosa por la emoción de pensar que tras
una de las ventanas estaba ella y pronto la tendría delante respondió:
-Soy yo, estoy en la puerta de tu casa.
Los primeros pensamientos que acudieron a su mente al
pronunciar esas simples palabras que llevaba planeando todo el viaje en el autobús
fueron preciosos, ella se sorprendería y bajaría inmediatamente a abrirle la
puerta y lanzarse a sus brazos, por fin volvería a tenerla a su lado aunque
fuera unos instantes y podrían hablar y aclarar las cosas entre ellas, sin
embargo lo que escuchó al otro lado de la línea telefónica fue muy diferente a
sus expectativas:
-¿Estás mal de la cabeza? ¿Cómo se te ocurre presentarte
así? Mis padres están en casa, no puedo hacer nada.
Por un segundo le faltó el aire, luego fue expulsado todo de
golpe, absolutamente todo, se sintió vacía, hueca y rematadamente estúpida. Era
cierto, probablemente se había vuelto loca ¿quién en su sano juicio cogería dos
autobuses sin avisar para ver a la persona que realmente quiere aunque esta no
parezca sentir lo mismo? Nadie, nadie destruiría sus sentimientos de una forma
tan tonta y voluntaria. Y a pesar de todo allí estaba. Una vez más,
arrastrándose, intentándolo todo para que ella estuviera a su lado, haciendo lo
imposible para que la situación volviera a ser lo que había sido hasta hace
unos meses.
En algún momento las lágrimas habían empezado a descender
por sus mejillas silenciosamente y se dio cuenta de que ella seguía al teléfono
esperando una respuesta. ¿Qué respuesta cabe esperarse después de semejante
cuchillada al corazón?
-Sí…es cierto…debería haberlo pensado mejor…adiós.
Y colgó.
Únicamente las separaba un muro. Seguramente estaría en su
cuarto con cara de incredulidad, mientras ella se había quedado petrificada en
la calle, esperándola.
La cercanía de ambas le dolía tanto, la abrasaba por dentro
la necesidad de derribar la puerta que las separaba, todo en su interior se
agitaba presa del dolor. Se dio media vuelta y empezó a correr calle abajo
hacia la estación de autobuses.